Una Visita Inesperada

Vam/Support Taller

Hoy en las Instalaciones de Vam/Support recibí la visita de un joven pequeño con una mente inquieta, llena de sueños e ideas, el interventor de la felicidad en mi existencia. Al parecer de buena fuente he sabido que es algo introvertido pero conmigo cotorrea chido, ¿Será que los introvertidos se llevan bien entre ellos? Puede ser. El bullicio y la estimulación que generalmente la mayoría necesita para estar en ambiente no forma parte de nosotros, es como una farra el estar en paz en tu interior, mientras disfrutas sentado de tu compañía en el escalón de tu puerta. 

Me di cuenta de lo cómodo que se sentía, veía detenidamente el taller como si cada cosa estuviera precisamente en su lugar a pesar del caos, para una mente con razonamiento convencional todo está fuera de su sitio, pero era como si él mismo lo hubiera desordenado en  forma ordenada, los cascos de americano, las herramientas le llamaban la atención, así como todo lo que tenía desarmado, me dijo -Me gusta tu música, tienes cocas, chocolates y videojuegos, ¿Qué no se supone trabajas aquí? -Así es respondí, -este es el lugar donde hago lo que más me gusta hacer, aunque algunos le pueden llamar trabajo.

-Sabes-, me replicó, -cuando sea grande me gustaría tener un taller, aunque no se bien que voy a reparar, no se arreglar nada, me gusta desarmar las cosas para ver cómo funcionan, hace unos días abrí el reloj de mi papá, se enojó mucho, tanto que rompió mis pinzas que me había regalado para que no lo volviera a hacer. Creo que nunca voy a aprender.

-No te desanimes, aun eres pequeño, tienes muchas yardas por recorrer [sonrió, creo que entendió la referencia]. Debes leer en abundancia, explorar, desarmar, calcular, saber escuchar y hacer notas para que puedas aprender, después enseña y comparte lo que has aprendido.

-Valora y trata a los demás con el suficiente respeto y agradecimiento nadie te deberá su atención tienes que ganártela. Si, en efecto, vas a cometer muchos errores pero te aseguro que aprenderás más que de tus aciertos. Te vas a caer cien veces pero debes aprender a levantarte doscientas. No tengas miedo a ser libre, tomaras riesgos pero siendo responsable de tus actos, has el bien y te ira bien. Recuerda que lo único que debe superar tu talento es la humildad.

-Cuando necesites de un amigo estaré para ti, eso sí tenme paciencia hace mucho tiempo que fui niño, a lo que respondió -No te preocupes yo estaré siempre contigo para recordártelo.